Venía haciendo ya bastante tiempo que no le pegaba un repasito a las últimas películas que he visto, así que allá vamos.
Tristán e Isolda. Aunque la historia viene a ser más vieja que el mundo al día de hoy (chico y chica se enamora y pertenecen a familias/reinos distintos y enfrentados), la verdad es que sigue funcionando. Se me hizo bastante entretenidilla y a pesar de que esperaba un fiasco bastante lustroso resultó ser una película que se dejaba ver con bastante gusto (y eso que a mi James Franco AKA Tristán me cae como una patada en los pendientes).
Scary Movie 4. Cierto, la saga (por llamarla de alguna manera) de Scary Movie no ha sido nunca precisamente muy buena, las dos anteriores son de lo más lamentable del mundo, pero yo con esta me he reído bastante en algunas escenas. El gag de los TRiPOD es sencillamente genial, y Leslie Nielsen tiene el increible poder de salir en pantalla y yo me crujo de risa (vuelve a hacer de presidente de los USA, como en la 3), y luego tiene otro par de chistes realmente graciosos en la parte que parodia El bosque.
Slither (La plaga). Esta es una película que recomendaría a todos los que disfrutan como enanos con las películas de terror de los 80 (como yo) y a los demás les diría que la ignoraran rápidamente. Una cosa alienígena infecta a un señor de un pueblo perdido de la mano de Dios y que lo va mutando en un bicho horripilante, que a su vez usa a una chica como criadero de unas babosas que cuando se le meten a la gente por la boca los convierte en zombies. O sea, lleno de topicazos, con unos puntos gore y mucho sentido del humor; como mandan los cánones de ese tipo de películas.
Cosas que nunca te dije. Bueno, ante todo decir que yo esta no la he visto, un hombre de pelo en pecho no ve estas cosas, pero vamos, tengo un amigo que me las cuenta (es un metereosexual de esos). Es una historia de sentimientos y soledad de las personas de un pequeño pueblo de los USA, centrados en dos personajes que acaban de dejar sendas relaciones y (como parecía natural) acaban liados; con una base argumental así podría haber sido un dramón de sobremesa al uso, pero Isabelo Coixet tiene mano para estas cosas… Recomendable para quienes les gusta ver historias reales sobre sentimientos de verdad y no las memeces pastelosas que a tanta velocidad escupe Hollywood.
Y con esto y un bizcocho, espero vuestras opiniones que esta vez he visto de todo…